Steve Harvey sufrió un duro golpe en su carrera cuando la NBC canceló su programa de entrevistas “Steve” a pesar del éxito del programa y sus altos índices de audiencia. Harvey se negó a permitir que esto lo destrozara; sacó fuerzas de su religión y dijo la famosa frase: “El Dios al que sirvo no me trajo hasta aquí para abandonarme”. Su fuerte mensaje sobre la resiliencia y la confianza en un plan divino fue su respuesta a la cancelación del programa.
En un video de Instagram que se volvió viral, Harvey expresó su convicción de que las oportunidades siempre parecen presentarse al final del túnel. Todo lo que sucede, incluso la cancelación de su programa, es un paso más en el camino hacia la superación personal, dijo.
Al comprender que los reveses conducen a oportunidades de crecimiento, esta perspectiva se hace eco de una creencia más universal de que las pruebas deben fortalecer la fe en lugar de debilitarla.
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